domingo, 8 de junio de 2014

Y, aunque...




Y aunque ya no sea lo mismo,
aunque ya no sea lo que fue,
aquí dentro ha dejado de llover
solo espero no volver a ver ese abismo.

Y es que aunque todo parezca difícil,
aunque todo se vuelva del revés,
aquí siempre me podrás ver.




lunes, 23 de septiembre de 2013

Otoño.

Otoño, ¿será esta mi estación?

Me lo imagino todo cubierto de hojas secas, viento, el suficiente como para abrigarte pero no como para morir helada. Es una época del año sombría, en la que los ánimos están por los suelos, mires donde mires, pase lo que pase siempre hay algo negativo.

He leído la frase "escribo para vaciar la mente y llenar el corazón" en algún sitio, es una frase muy de otoño, aunque no sé bien porqué. Vaciar la mente, parece fácil dicho así, pero son tantas cosas las que dan vueltas en este pequeño mundo que hay justo arriba de mis hombros (otros lo llaman cabeza). ¿Qué hice? ¿Qué estoy haciendo? ¿Qué voy a hacer? Entre otras muchas otras preguntas. ¿Llenar el corazón? Mejor no hablemos.

Cambiaré este otoño por un otoño de verdad, de eso en los que puedes hacer todo lo que te propongas, en los que los "no puedes conseguirlo" no existen.

Staying Strong in Autumn.

sábado, 20 de julio de 2013

Incertidumbres


¿Cómo se supone que debo actuar? ¿Qué debo decir? No sé siquiera que sentir.
El tiempo pasa y yo sigo aquí, sentada, sin hacer nada. Quizás solo tenga que dejar que pasen las cosas, que los momentos den lugar uno detrás de otro y que lo único que tenga que hacer es aprovecharlos los mejor que pueda y sepa. Pero, ¿y si no puedo? ¿Y si no sé? Entonces, ¿qué pasa?

sábado, 22 de junio de 2013

Un año savático

Dejar volar la imaginación es volar alrededor del mundo.

El domingo 30 de junio comenzará la aventura. Nuestro primer destino será Italia, donde visitaremos Florencia y Roma. Luego Grecia, una país de casas blancas y mar azul. Allí, iremos a Santorini, Hidra y Atenas. Al poco tiempo nos desplazaremos a Malta, donde Julia me enseñará todos los sitios que ella vio en el verano de 2012. 
Después de todos estos lugares, cambiaremos de continente y estaremos el tiempo justo en San Petersburgo para saludar a Anastasia y a toda la Dinastía Romanov. Moscú lo dejaremos para el próximo viaje. 
América nos espera. Un recorrido por todos los estados de EEUU, sin olvidar hacer ciertas cosas como un paseo en helicóptero por el Gran Cañon del Colorado. Esto será algo más cansado, por lo que terminaremos el tour en California, iremos a DisneyLand y luego terminaremos el verano en nuestro apartamento junto a la playa. Aquí también quedan cosas pendientes para el próximo viaje, América del Sur tiene cosas fantásticas. 
Cuando el verano haya terminado, volaremos a Londres y estaremos varios días. Pero lo más importante de todo, justo después de visitar esta ciudad viajaremos a nuestro "petit Paris". Volveremos a andar por calles parisinas y la felicidad regresará tal y como vino ese 5 de abril. 
Para terminar la aventura visitaremos Bélgica, no podemos pasarnos por alto este país siento tan bonito y estando tan cerca, así que veremos Brujas y Gante. 
Regresaremos a casa con medio mundo visto, para entonces será verano de nuevo. 


lunes, 17 de junio de 2013

El buscador, Jorge Bucay.

"Esta es la historia de un hombre al que yo definiría como buscador Un buscador es alguien que busca. No necesariamente es alguien que encuentra. Tampoco esa alguien que sabe lo que está buscando. Es simplemente para quien su vida es una búsqueda. 
Un día un buscador sintió que debía ir hacia la ciudad de Kammir. Él había aprendido a hacer caso riguroso a esas sensaciones que venían de un lugar desconocido de sí mismo, así que dejó todo y partió. Después de dos días de marcha por los polvorientos caminos divisó Kammir, a lo lejos. Un poco antes de llegar al pueblo, una colina a la derecha del sendero le llamó la atención. Estaba tapizada de un verde maravilloso y había un montón de árboles, pájaros y flores encantadoras. La rodeaba por completo una especie de valla pequeña de madera lustrada… Una portezuela de bronce lo invitaba a entrar. De pronto sintió que olvidaba el pueblo y sucumbió ante la tentación de descansar por un momento en ese lugar. El buscador traspaso el portal y empezó a caminar lentamente entre las piedras blancas que estaban distribuidas como al azar, entre los árboles. Dejó que sus ojos eran los de un buscador, quizá por eso descubrió, sobre una de las piedras, aquella inscripción … “Abedul Tare, vivió 8 años, 6 meses, 2 semanas y 3 días”. Se sobrecogió un poco al darse cuenta de que esa piedra no era simplemente una piedra. Era una lápida, sintió pena al pensar que un niño de tan corta edad estaba enterrado en ese lugar… Mirando a su alrededor, el hombre se dio cuenta de que la piedra de al lado, también tenía una inscripción, se acercó a leerla decía “Llamar Kalib, vivió 5 años, 8 meses y 3 semanas”. El buscador se sintió terrible mente conmocionado. Este hermoso lugar, era un cementerio y cada piedra una lápida. Todas tenían inscripciones similares: un nombre y el tiempo de vida exacto del muerto, pero lo que lo contactó con el espanto, fue comprobar que, el que más tiempo había 
vivido, apenas sobrepasaba 11 años. Embargado por un dolor terrible, se sentó y se puso a llorar. El cuidador del cementerio pasaba por ahí y se acercó, lo miró llorar por un rato en silencio y luego le preguntó si lloraba por algún familiar. 
- No ningún familiar – dijo el buscador - ¿Qué pasa con este pueblo?, ¿Qué cosa tan terrible hay en esta ciudad? ¿Por qué tantos niños muertos enterrados en este lugar? ¿Cuál es la horrible maldición que pesa sobre esta gente, que lo ha obligado a construir un cementerio de chicos?. El anciano sonrió y dijo: -Puede usted serenarse, no hay tal maldición, lo que pasa es que aquí tenemos una vieja costumbre. Le contaré: cuando un joven cumple 15 años, sus padres le regalan una libreta, como esta que tengo aquí, colgando del cuello, y es tradición entre nosotros que, a partir de allí, cada vez que uno disfruta intensamente de algo, abre la libreta y anota en ella: a la izquierda que fu lo disfrutado…, a la derecha, cuanto tiempo duró ese gozo. ¿Conoció a su novia y se enamoró de ella? ¿Cuánto tiempo duró esa pasión enorme y el placer de conocerla?…¿Una semana?, dos?, ¿tres semanas y media?… Y después… la emoción del primer beso, ¿cuánto duró?, ¿El minuto y medio del beso?, ¿Dos días?, ¿Una semana? … ¿y el embarazo o el nacimiento 
del primer hijo? …, ¿y el casamiento de los amigos…?, ¿y el viaje más deseado…?, ¿y el encuentro con el hermano que vuelve de un país lejano…?¿Cuánto duró el disfrutar de estas situaciones?… ¿horas?, ¿días?… Así vamos anotando en la libreta cada momento, cuando alguien se muere, es nuestra costumbre abrir su libreta y sumar el tiempo de lo disfrutado, para escribirlo sobre su tumba. Porque ese es, para nosotros, el único y verdadero tiempo vivido."

domingo, 5 de mayo de 2013

¿Por qué escribir textos largos y muy pensado pudiendo escribir lo primero que se venga a la mente? Desahogarse sin más dejar que los dedos se muevan solos por el teclado, escribir todo lo que piensas... Creo que eso voy a hacer a partir de ahora, simplemente escribir.